El Despacho fue fundado en 1983 por Isabel Fernández-Gil Viega, quien continúa dirigiéndolo. FERNÁNDEZ-GIL ABOGADOS es un despacho compuesto por un equipo de profesionales que tienen como rasgo común el ejercicio de la abogacía con la actividad académica, el estudio y la investigación.
Los profesionales del despacho están firmemente convencidos de que la mejor práctica del Derecho es aquella que se basa en la formación y en el estudio permanente.
Y en este sentido, en colaboración con las Universidades Carlos III de Madrid y la Universidad Pontificia de Comillas, preparan a sus alumnos para el ejercicio de la abogacía, haciendo éstos en el despacho el “practicum” que les capacita para el mundo laboral.
La especialidad de su fundadora se concentra en el ámbito del Derecho Privado, que abarca las materias relacionadas con el Derecho Civil, Mercantil, Internacional Privado y Derecho Canónico.
En el ejercicio de la profesión, se abordan todos los problemas derivados de los Contratos y Obligaciones, de los Derechos Reales, de la Propiedad Intelectual, del Derecho de Familia y Sucesiones, incluidas las nulidades canónicas; así como los relativos al ámbito mercantil y empresarial y en general todas las cuestiones relativas al derecho de la persona.